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martes, 2 de agosto de 2011

VOY CAMINO CÓRDOBA II

                     


(RECOMENDADO LEER CAMINO A CÓRDOBA I)


Ya en carretera parece que Nube se ha deshinchado algo, gracias en parte al masaje.

-¿Jugamos a contar historias?- sugiere Ali.
-Cada uno que cuente algo que haya hecho que ahora le de vergüenza.
-¡Arrrgggg!, ¿esto cuenta? porque me va a dar vergüenza el resto de mi vida.
Todas nos reímos.
-Vale, incluso es posible que ganes- dice Ali- Jossy te toca.
-Ummhhhh, ya lo tengo, Bela ¿te acuerdas cuando me llevaste a urgencias con dolor en el pecho y tu querías depilarme antes y yo no te dejé porque me encontraba fatal?
-Sí y luego el médico de urgencias estaba como un camión, ja por no dejarme.
-Pues me dio mucha vergüenza.
-Espera, no depilarte ¿es lo más vergonzoso que has hecho en tu vida?- le pregunto.
-Ummm ¿si?- responde Jossy.
-Vete por ahí, Ali y tú- digo yo.
-Pues va a ser el día que me cogí el pedo ese en que intenté usar a Tito de bola de bolos.
-Ja ja ja ja- Tito es el hijo mediano de mi hermano y en esa época tenía cuatro años- todavía me acuerdo- dice Nube.
-El niño encantado pensando que iba a volar- recuerdo yo.
Todas nos reímos, recordando a Ali con el niño en brazos y al crío…-(papá soy una bola voy a tirar bolos)- y a mi hermano sorteando obstáculos, empujando jugadores, saltando por encima de los carros de las bolas, para llegar a Ali antes del gran lanzamiento.
-¿Y tú?- me pregunta Ali cuando por fin terminamos de reir.
-Pues en Ibiza… bueno no lo de Madrid es más…
Ali nota que el coche da un tirón y se desestabiliza, se ve obligada a dar un volantazo para controlarlo, todas habíamos escuchado un buf seguido de plof plof plof.
-¡Dios que susto!, creo que hemos pinchado- nos informa Ali.
-¡Arrrrgggg! Jopetas con el susto han vuelto los gases.
-Para en el arcen- sugiero.
-En ello estoy- me contesta Ali.
Después de parar el coche Ali y yo nos ponemos los chalecos reflectantes y salimos a poner el triángulo y ver qué ha pasado, efectivamente hemos pinchado, parecía que mirábamos un extraterrestre y nuestro mayor deseo en ese momento es que se arreglase solo, nosotras las mujeres no sentimos la urgente necesidad de arreglar cosas rotas para estabilizar nuestra testosterona.
-Vale tranquilas, a sortear quién es la que se pone a parar coches para pedir ayuda- dice Ali.
-Ali ya te vale como si las mujeres no pudiéramos…- intento protestar yo, pero Ali me interrumpe poniéndose con los brazos en jarra delante de mí.
-Mira lo que te digo como te pongas en plan feminista lo arreglas tú ¿eh?
-Yo…eh…- contesto mirando al suelo- bueno…
-Pues eso, a ver ¿Quién se pone a pedir ayuda?- pregunta Ali muy digna.
-Yo soy hippy y no puedo enseñar las piernas que tengo pelos- contesta Jossy.
-Que jeta- le respondo yo.
-Si queréis voy yoaarrgggg!
-No bonita tu quédate ahí- contesta Ali- entre tu y yo Bela.
-Como siempre, joder- me quejo yo.
-¿Y si llamamos a asistencia en carretera?- pregunta Nube. Las tres dirigimos nuestra mirada hacia ella.
Otra vez en ruta, ahora conduzco yo y Jossy a mi lado “guiándome”
-Oye ¿y si nos desviamos para comprar tortas?- Pregunta Jossy.
-Vale- respondo yo.
-Coge el siguiente desvío- veo el siguiente desvío pongo el intermitente y me dispongo a tomarlo.
-¡Nooooooo! Este no el siguiente- me grita Jossy- es que hermana…
-Oye, que el siguiente es el que viene después no el otro- me quejo yo.
-Pues eso quería decir, ahora para allá- me dice.
Para allá, veo que puedo ir a derecha, izquierda o seguir recto y me dice para allá.
-Para allá para dónde- le pregunto.
-Jope pues para allá- de reojo veo que señala con la mano a la derecha y mis otras dos hermanas se parten de risa.
-¿A la derecha?- casi le chillo.
-¡Nooooo! Para el otro lado mujer- me contesta cuando ya estoy cogiendo la derecha.
-¡Entonces para qué señalas a la derecha!- ahora ya sí le grito.
-Eso es la izquierda- me contesta.
-En tu mundo no lo dudo- le digo- pero como sigas guiándome te vas andando.
-Bela tranquila, ella siempre lo dice al revés- me dice Ali entre risas.
-Pues ya me lo podías haber dicho antes- digo mirando amenazante a Jossy- y no voy a traducirte así es que calladita ¿vale?
Piso el freno, la miro ella hace el gesto de cremallera en boca y diez minutos después hemos llegado al pueblo, además de tortas decidimos pasar por una farmacia para comprarle a Nube Aerored.
Ali y yo entramos a la farmacia con nuestros súper bolsos y nuestros súper tacones golpeando el suelo, todo glamur. Los pocos oriundos del pueblo que nos divisan nos miran con recelo.
-Buenos días- dice Ali- ¿me da Aerored por favor?
-¿Aerored?- repite la farmacéutica mirándonos con una sonrisita.
-Sí gracias- le contesta Ali muy educada.
-Y una caja de condones- digo yo de repente.
-¿Perdón?- exclaman al unísono Ali y la dependienta.
-Condones, sabor a fresa, extra largos- la mujer nos mira por encima de las gafas levantando las cejas y desaparece tras una puerta.
-¿Para qué coño quieres tú una caja de condones?- me pregunta Ali.
 -Porque prefiero que nos recuerden como las liberales de los condones que como las pedorras del Aerored, es una cuestión de clase y cállate que vuelve.
A los diez minutos estamos de nuevo en la carretera y volvemos a la carretera cargadas de tortas, Aerored y condones.

2 comentarios:

Bela Marbel dijo...

Como lo prometido es deuda ahí tenéis la segunda parte del viaje a Córdoba, aún queda una tercera, espero que la disfrutéis.

bela marbel dijo...

gracias a tod@s l@s seguidor@s del blog, no os podéis imaginar la ilusión que me hace cada vez que veo alguien nuevo.